
Escuela de Música fomenta el disfrute de la música en todos sus aspectos y se basa en la creencia de que es uno de los métodos más adecuados y efectivos para enseñar de forma divertida.
Estimula el cerebro, el razonamiento y la resolución de problemas y abre la puerta a nuevas destrezas individuales y a una mayor proyección personal hacia el futuro. La música es, sin lugar a dudas, un lenguaje universal. Sin embargo, aunque cualquier persona es capaz de escuchar ese idioma, no todo el mundo puede hablarlo; por ello una educación musical significativa tiene una relevancia múltiple; más allá de potenciar el pensamiento lateral y la empatía a través del respeto a otras expresiones culturales, la música perfecciona las habilidades comunicativas al conectarlas a las emociones, pues implica adquirir una destreza con valor en sí misma.
Dirigido a niños de infantil y primaria, cumple también con el objetivo de presentar conceptos musicales básicos como notas, instrumentos y canciones populares, y está diseñado para mejorar las capacidades motriz y auditiva del alumnado a través de distintas composiciones que refuerzan vocabulario, desarrollan habilidades cognitivas importantes como la memoria, y capacitan a los alumnos mediante ejercicios motivadores y cercanos a sus intereses.
Fomenta tanto el trabajo autónomo como la participación activa de los alumnos, la cooperación entre compañeros y el desarrollo de las distintas aptitudes sociales. Los niños escuchan, aprenden, cantan canciones, tocan un instrumento, bailan coreografías y juegan.
La música al servicio del desarrollo evolutivo es un elemento motivador que, sin duda, consigue conectar con los alumnos.