LAS LUDOTECAS: CONCILIACIÓN Y DIVERSIÓN
¿Tienen los niños derecho a jugar? La respuesta es un rotundo sí. la Convención de los Derechos del Niño, adoptada por la Asamblea de las Naciones Unidas así lo recoge. El juego es un impulso primario que nos empuja desde pequeños a explorar y amar el mundo que nos rodea, y a crecer sanos y en armonía con nuestro cuerpo, inteligencia, afectividad, creatividad y sociabilidad. La actividad principal en la vida de un niño es jugar y responde a la necesidad humana de mirar, experimentar, imaginar, comunicar y soñar. Para nosotros, los adultos, jugar con ellos ayuda a nuestra salud física y mental y estimula nuestra capacidad de disfrutar de la vida y el momento.